Una controvertida decisión de penalti en el partido AJ Auxerre-Olympique Lyonnais de este fin de semana provocó que se aplicara una regla poco conocida de la Ligue 1.
Con el partido empatado 0-0 cerca del final de la primera mitad, Lyon recibió un tiro penal cuando Georges Mikautadze (23) cayó al suelo tras una entrada de Gideon Mensah (26).
Los visitantes protestaron porque el árbitro Jérémie Stinat ya había pitado un saque de meta antes en la jugada. El segundo entrenador del Auxerre, Jean-Marie Stephanopoli, fue expulsado durante la confusión después de que un control del VAR otorgara un penalti al Lyon.
El capitán del AJA, Jubal (31), presentó una queja formal al árbitro, conocida como reserva técnica escrita.
En el fútbol francés, esta petición puede hacerse después de la decisión del árbitro y antes de que se reanude el juego, razón por la cual hubo un retraso de más de 15 minutos antes de que se ejecutara el penalti del Lyon.
El artículo 559 del reglamento del fútbol francés establece: “Una reserva por cuestiones técnicas sólo es admisible si la formula al árbitro el capitán que formula la queja durante la interrupción del juego, y que es consecuencia de la decisión impugnada”.
Si el desafío tiene éxito, el objetivo en cuestión puede ser descartadoy por tanto el partido se repite. Esta reserva debe ser enviada en un plazo de 48 horas mediante carta certificada a la Liga de Fútbol Profesional y acompañada de una cantidad de 76 €.
Mikautadze dio un paso al frente y convirtió desde 12 metros de distancia. DAZN vio a Jubal presentando la denuncia al árbitro, aunque el equipo no dio seguimiento a la denuncia después del pitido final.
Esto significa que el empate 2-2 se mantendrá, y el técnico del Auxerre, Christophe Pélissier, afirmó que habló con el árbitro al final del partido.
Auxerre vino desde atrás dos veces para ganar un punto y ahora están invictos en partidos consecutivos de la Ligue 1, lo que les sitúa en el puesto 13 de la tabla.
GFFN | Joel Lefèvre