Amine Gouiri, producto de la Academia de Lyon, de 24 años, está jugando su tercera temporada con el Stade Rennais después de que el club bretón rompiera su récord de transferencias al traer al entonces internacional francés sub-21 procedente del Niza a cambio de 28 millones de euros. Aunque esta suma está fuera de su control, es cada vez más difícil justificar el desembolso de Rennes por Amine Gouiri dadas sus dificultades para liderar la línea de Les Rouge et Noir.
También es difícil describir las áreas en las que Gouiri ha mejorado en los últimos años desde su cambio del Allianz Riviera al Roazhon Park. Con Les Aiglons, Gouiri anotó 47 goles (28 goles, 19 asistencias) en dos temporadas. En Rennes, suma 41 en 97 apariciones. Recientemente, Gouiri jugó la mayor parte del tiempo como delantero centro o segundo delantero, cuando Rennes podía confiar en Jérémy Doku y Désiré Doué para causar estragos desde la banda izquierda.
Ambos se fueron a pastos más verdes (Manchester City y Paris Saint-Germain), mientras que Rennes también se separó de Martin Terrier y del esencial Benjamin Bourigeaud, dejando a Gouiri con la responsabilidad de cargar con una parte más amplia de la carga goleadora del equipo. Gracias a su talento y habilidades, Gouiri conserva la capacidad de anotar de la nada, como lo demostró su impresionante gol en solitario contra el PSG, donde dribló a Danilo Pereira antes de perforar uno en la esquina superior de Gianluigi Donnarumma con el exterior de la bota.
Gouiri también está floreciendo bajo la tutela del seleccionador de Argelia, Vladimir Petkovic, tras su cambio de nacionalidad. El delantero nacido en Francia registró cuatro goles y dos asistencias en sus últimos seis partidos de clasificación para la AFCON con Les Verts. Desgraciadamente, en Bretaña no se encuentra una producción tan prolífica.
Se acerca el momento decisivo para Gouiri
Después de una pretemporada convincente y una actuación notable en la goleada por 3-0 del Rennes contra el Lyon en la primera jornada, Gouiri volvió a pasar por una mala racha, aparentemente incapaz de lograr una asociación funcional en el campo con una franja de jugadores contratados durante el verano. Gouiri tardó tres meses enteros en encontrar el fondo de la red, ante un Saint-Etienne que se rindió y se quedó con 10 hombres.
Su ex entrenador, Julien Stéphan, dijo un par de veces que esperaba más regularidad del número 10 de Rennes, recordándole que el desempeño en el campo dicta la elección del personal por parte de los entrenadores. Su sucesor en el banquillo de Rennes, Jorge Sampaoli, parece mucho menos indulgente: “Espero que pueda convertirse en un líder ofensivo, pero hasta ahora no lo es”. ¿Responderá Gouiri a la llamada de Sampaoli antes de que al Rennes se le acabe la paciencia?
GFFN | Bastien Cheval